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Faringoamigdalitis aguda («anginas»): mitos y leyendas

La faringoamigdalitis aguda es la enfermedad que se conoce habitualemente como «anginas» y su causa suele ser infecciosa. Afecta a la faringe o como vosotros soléis decir, a la garganta. Es muy frecuente en niños aunque puede afectar a también a adultos. Los pediatras, tanto de atención primaria como de los servicios de Urgencias, estamos muy acostumbrados a tratar con ella.

En el post de hoy repasamos los aspectos más importantes de esta enfermedad a través de sus mitos y leyendas.

1. Si mi hijo no tiene «placas» es que no son anginas. FALSO

La faringoamigdalitis es la enfermedad que cursa con inflamación de la faringe y/o las amígdalas, generalmente de causa infecciosa. A nivel local podemos encontrar eritema, edema, exudados («placas»), úlceras o vesículas, pero ninguna de ellas es indispensable para el diagnóstico.

2. Las faringitis, amigdalitis y faringoamigdalitis son enfermedades distintas. FALSO

Estos tres términos son formas diferentes de llamar a la misma enfermedad. Además comparten las mismas causas y tratamientos, por lo que da igual cual de ellas usemos ya que nos estamos refiriendo a lo mismo. En lenguaje coloquial se conocen como «anginas».

3. Si mi hijo tiene faringoamigdalitis es culpa de una bacteria. FALSO

Como todas las infecciones en pediatría, éstas pueden estar causadas por virus o por bacterias. La bacteria que más frecuentemente causa esta infección se llama Streptococcus pyogenes (o betahemolítico) y es responsable de menos del 30% de los casos en global (35% de las faringoamigdalitis de niños de 3 a 13 años, en el 7% de los 2 a los 3 años, en el 4% de los menores de 2 años y excepcional en los menores de 18 meses). Por ello la cusa más frecuente de una faringoamigdalitis son los virus. Sin embargo, el objetivo del pediatra será diferenciar cuáles de ellas están causadas por esa bacteria.

4. Si me tose encima alguien con anginas es probable que me contagie. VERDADERO

La forma de trasmisión del Streptococcus pyogenes es a través de las gotitas que se forman cuando algún paciente habla, tose o estornuda. Es muy difícil contagiarse a través de algún objeto en el que haya caído alguna de estas bacterias como un pañuelo, la comida o el agua.

Respecto a los virus estos se trasmiten por gotitas pero también por contacto con las secreciones respiratorias del paciente.

5. Si mi hijo con anginas tiene fiebre alta la causa más probable será bacteriana. VERDADERO (A MEDIAS)

La gran mayoría de las veces es difícil diferenciar entre causa vírica y bacteriana basándonos solo en la clínica. Datos como la fiebre alta, el malestar general, la cefalea y la aparición brusca orienta hacia las bacterias mientras que la presencia de tos, mucosidad, afonía y diarrea son comunes en las faringoamigdalitis de origen vírico.

6. Es imprescindible hacer pruebas para confirmar la causa de las anginas. FALSO (A MEDIAS).

La mayoría de los pediatras nos basamos en la clínica y la exploración para orientar hacia que patógeno esta causando la faringoamidalitis del niño. En función de la sospecha mandaremos al paciente un tratamiento sintomático o, en le casos de sospechar la causa bacteriana, un antibiótico.

En determinados servicios está disponible un test rápido para Streptococcus (similar a una prueba de embarazo pero con secreción de la garganta) para confirmar la presencia de esta bacteria o recoger un cultivo faríngeo (frotis) del que obtendremos el resultado en unos días. La utilidad de estas pruebas es importante para poder prescribir antibióticos solo a los niños que lo necesiten.

7. Las complicaciones de las anginas bacterianas son muy frecuentes. FALSO

Existen complicaciones que se conocen como «supurativas» y dan lugar a la formación de abcesos (acúmulo de pus) en la garganta. Ocurren en el 1-2% de las faringoamigdalitis por Streptococcus que no han sido tratadas con antibiótico o que no completaron la pauta de días que se le prescribió.

Por otro lado existen las complicaciones «no supurativas» (sobre todo, fiebre reumática y glomerulonefritis postestreptocócica), son muy raras y se evitan también realizando el tratamiento antibiótico completo.

8. Si mi hijo necesita antibiótico para las anginas hay que darle un antibiótico muy potente. FALSO

Los antibióticos que se emplean para tratar cualquier infección causada por bacterias son los que cubren con menor espectro las bacterias que más probablemente cusan la infección, es decir se utiliza el antibiótico más específico para tratar a la bacteria que se sospecha.

En le caso de las faringoamidalitis se emplea la penicilina oral ya que el Streptococcus pyogenes es sensible a este antibiótico.

9. Aunque mi pediatra me mande 10 días de antibiótico, si la fiebre desparece rápido puedo darle menos días de tratamiento a mi hijo. FALSO

La recomendación actual es la de tratar las faringoamigdalitis durante 10 días ya que con esta pauta se consiguen las más altas tasas de erradicación del Streptococcus de la garganta. Debido a ello da igual que la respuesta al antibiótico haya sido muy buena, ya que debemos mantenerlo durante 10 días.

10. Si mi hijo tiene anginas no puede ir al colegio. FALSO (A MEDIAS)

En el caso de las faringoamigdalitis causadas por bacterias dejan de contagiar a las 24 horas tras haber comenzado con el antibiótico por lo que podrían ir al colegio después de un día de reposo en casa y siempre que haya desaparecido la fiebre. En el caso de que la etiología sea viral (las que no necesitan antibiótico) será suficiente esperar a que el niño este sin fiebre y se encuentre mejor.

11. Si mi hijo tiene muchas anginas hay que operarle. VERDADERO (A MEDIAS)

La cirugía de las amígdalas está indicada de forma arbitraria (es decir, sin una evidencia clara) en aquellos niños que han presentado más de 7 episodios confirmados de anginas por Streptococcus en un año, más de 5 en cada uno de los dos últimos años y más de 3 en cada uno de los tres años anteriores. En los niños en los que se ha realizado la cirugía se ha observado que tienen menos episodios comparado con los que se decidió no operar, sin embargo el beneficio de la cirugía no está todavía del todo claro.


La información de este post ha sido extraida del «Documento de consenso sobre el diagnóstico y tratamiento de la faringoamigdalitis aguda» de la Asociación Española de Pediatría publicado en 2011 y que actualmente (enero 2018) está en vigor. Puedes consultarlo en este Link.